Con el objetivo de coordinar acciones conjuntas para la erradicación del uso de pirotecnia en la ciudad, la intendente Sara Majorel mantuvo un encuentro con la jueza de faltas Sofía Benassi, autoridades policiales y presidentes de los clubes de la ciudad. Del la reunión participaron padres de niños y adultos neurodivergentes que aportaron su conocimiento a la problemática.
Dese el municipio indicaron que «el objetivo del encuentro fue continuar coordinando acciones conjuntas para seguir erradicando el uso de pirotecnia en la ciudad, una práctica que sigue generando consecuencias negativas en distintos sectores de la comunidad, así como también en los animales».
En el transcurso del encuentro José Cavallera, vecino de la ciudad, expresó con el impacto que los estruendos provocan en niños y adultos neurodivergentes. «Cada explosión puede desencadenar una crisis de ansiedad y miedo que se prolonga hasta siete días», indicó.
A esto se suma el daño que también sufren los animales, que reaccionan con estrés y temor ante los ruidos intensos, muchas veces sin posibilidad de recibir la asistencia adecuada.
Cabe destacar que desde diciembre del 2019 está vigente en la ciudad una ordenanza que establece la prohibición del uso y venta de productos pirotécnicos en el ejido urbano. Sin embargo suelen repetirse en eventos deportivos o celebraciones multitudinarias la utilización de elementos que superan los parámetros permitidos.